El PET es uno de los materiales de envasado que más ha incrementado su consumo en los últimos años resulta, por sus características, especialmente interesante de reciclar y existe una importante demanda del producto reciclado para diversas aplicaciones.
Este plástico puede encontrarse en la mayoría de los envases de bebidas que se consumen hoy en dia, entre sus ventajas se considera que no ocasiona impactos severos a la salud, y representa un riesgo menor para el medio ambiente que el PVC.
Los sistemas de aprovechamiento del PET postconsumo se pueden clasificar en tres grupos: reciclado mecánico, reciclado químico y valorización energética. El reciclado mecánico es el sistema más utilizado, y el que nosotros elegimos para trabajar día a día.
El producto final de las plantas de reciclado mecánico es un material en forma de escamas, susceptible de ser utilizado en la mayor parte de las aplicaciones del PET, a excepción de aquellas que supongan contacto directo con un alimento.